La palabra del Señor nos enseña que podemos estar llenos de buenas
intenciones y querer hacer lo mejor pero cuando no nos sujetamos a Dios o
a nuestros líderes terrenales en vano es todo el trabajo que hagamos
dice la palabra de Dios mejor que los sacrificios es el obedecer. Y es
algo que nos cuesta mucho en este tiempo nos volvemos VOLUNTARIOSOS.
Queremos hacer nuestra voluntad la palabra enseña:
Y
Samuel dijo: ¿Tiene Jehová tanto contentamiento con los holocaustos y
víctimas, como en obedecer á las palabras de Jehová? Ciertamente el
obedecer es mejor que los sacrificios; y el prestar atención que el sebo
de los carneros:
1 Samuel 15:22
De
las cosas más difíciles de aceptar en la vida es someterse a la
voluntad o autoridad de alguien más. ¿Por qué cuesta tanto trabajo
obedecer? Razones puede haber muchas, tal vez la más común se da
cuando inconscientemente no se reconoce ni se acepta la autoridad, o
que haya alguien que tenga poder y decisión por encima de la nuestra.
¿Conviene obedecer a Dios? Claro, el ser humano se evitaría un sinfín
de aprietos, aflicciones, angustias, humillaciones y conflictos si tan
solo eligiera de continuo obedecer a Dios. Jonas cosechó mucha
adversidad por no obedecer la comisión de ir a Nínive a advertir a sus
habitantes que Dios los destruiría a corto plazo.
Dios
es la total Autoridad; es infinitamente sabio para dar una orden. En
consecuencia, siempre quiere para nosotros lo mejor y sabe perfectamente
lo que nos conviene. Por esto, la obediencia a Dios es una prueba de
amor, de sensatez y del goce de bendiciones, y esto, aunque los
pensamientos divinos no coincidan con los nuestros.
Jonas
la segunda vez que lo mando después de estar dentro del pez, no fue la
correcta; el fruto de su supuesta obediencia produjo
pesar, desagrado, tristeza, indignación y enojo. La auténtica
obediencia nunca produce algo semejante. El hombre perfecto
(Jesucristo) fue obediente hasta la muerte y muerte de Cruz; en este
caso obediente a Dios Padre. Y hallado en la condición como hombre, se
humilló á sí mismo, hecho obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.
Filipenses 2:8
La
obediencia de Cristo no fue sólo el último gran acto redentor de su
vida, más bien fue un estilo de vida en Él. Y es lo que Dios quiere que
nosotros hagamos que no obedezcamos como el ultimo recurso si no que se
vuelva un modo de vida en nosotros el ser obedientes a Dios. La
obediencia hacia Dios se refleja en la obediencia y sujeción a nuestros
líderes o pastores. “Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos;
porque ellos velan por vuestras almas.” Hebreos 13:17
Es
un Mandamiento de Dios. Sea cual sea el pastor que Dios envíe al lugar.
Hay que
obedecerlos hay que ver por ellos, hay que ofrecer y manifestar con
acciones el apoyo y ayuda. No solo de palabras. Hermanos mejor que todo lo
que podamos hacer aun que parezca bueno pero si no estamos obedeciendo
de nada sirve digámosle a Dios este día. QUIERO OBEDECERTE A TI. Que
Dios los bendiga mucho.
Redacción: Rev. Natanael Montes de Oca