OCTUBRE 2009

En los Juegos Olímpicos de verano de 2004, el atleta estadounidense Matthew Emmons estaba listo para su disparo final y alcanzar la medalla de oro en rifle tres posiciones cincuenta metros. Se encontraba tan por delante de los otros competidores que lo único que tenía que hacer era enviar una bala a cualquier lugar dentro del círculo interior del blanco y obtendría la medalla de oro.
Se preparó de manera mental. Contuvo la respiración. Apuntó. Entonces disparó. La bala atravesó justo el blanco.
Con todo, se quedó sorprendido cuando no sonó el tono que indicaba diana. Emmons entonces comprendió que disparó en la diana equivocada. De la primera posición y de una medalla de oro garantizada, cayó hasta la octava posición.

El disparo adecuado dio en la diana equivocada.
Un día estaremos delante del Juez justo, ¿qué le dirás cuando Él te diga que, que en tu vida le diste al blanco equivocado?
¿Qué es una vida? Es una montaña de años, días, y minutos ocupados con balas de momento a momento… apuntadas hacia alguna parte.
¿Qué sucede cuando un tiempo suficiente se ocupa con decisiones mal dirigidas? Antes de darte cuenta, vino una vida y se fue, y te quedas sorprendido al descubrir que erraste el blanco por completo.
Lo que atesoramos en nuestro núcleo central es a lo que apuntamos en nuestra vida.
¿Cuáles son tus valores centrales?
Cuando Dios te creó, plantó en tu corazón ciertas cosas que valoras de manera profunda, se convierte en las fuerzas impulsoras de tu vida. Son las cosas por las que estarías dispuesto a morir. Explican el modo en que adquieres tus prioridades personales.
Tus valores centrales son para ti como la perla para el comerciante en la historia que conto Jesús: “También se parece el reino de los cielos a un comerciante que andaba buscando perlas finas. Cuando encontró una de gran valor, fue y vendió todo lo que tenía y la compró” (Mateo 13:45-46)
Cuando estés en contacto con los valores centrales que Dios te ha dado, así es cómo pensarás y vivirás. Tus valores centrales acomodarán y dirigirán tus energías, tu tiempo, tus pensamientos. Si los pasa por alto, tarde o temprano serás desgraciado. Si los identificas y vas tras ellos, liberarás tu potencial y te prepararás para el cumplimiento y el éxito.
¿Qué es lo más importante en tu vida? ¿Dónde te niegas a doblegarte?
Tu respuesta es un valor central. Es un deseo o prioridad que te impulsa, quizá diferente al de todas las demás personas que conoces, y que Dios ha puesto dentro de ti para ayudarte a saber hacia dónde apuntar tu vida.